Eran cientos los dioses a los que se rendía culto en el antiguo Egipto. Muchos mantenían algún vínculo con el faraón, cuyo prestigio divino ha quedado reflejado en los impresionantes monumentos que erigía en honor a los dioses. Amón-Re se convirtió en el dios supremo del panteón egipcio durante el Reino Nuevo. Esta estatuilla es originaria del inmenso templo del dios en Karnak, parte de la ciudad vieja de Tebas. Los faraones enriquecieron y ampliaron continuamente el sagrado lugar durante dos asombrosos milenios hasta convertirse en uno de los mayores complejos religiosos del mundo. Amón-Re es habitualmente representado con forma humana, un tocado compuesto por dos plumas y un disco solar, señal de su asociación con el sol. La barba con la punta curva es un atributo de los dioses. Amón-Re también podía adoptar la forma de un carnero, símbolo de virilidad y de fecundidad. Esta figura está realizada con plata sólida y partes de vestido cubiertas en oro. Se creía, de hecho, que los dioses tenían piel de oro y huesos de plata. La exposición “Faraón. Rey de Egipto”, organizada en colaboración con el @britishmuseum, está actualmente en CaixaForum València hasta el 26 de febrero de 2023. Estatuilla del dios Amón-Re. Plata sobredorada, c. 1069-656 a. C. Karnak, Tebas, Egipto. © Trustees of The British Museum #CaixaForumFaraón #CaixaForumBritish #AmónRe #Egipto#Tebas #Karnak #Dioses