tenía la cara del amor. Yo tenía estampada en mi cara la cara del amor. Yo tenía en mi cuerpo estampado el cuerpo del amor. Y pesaba menos y me sentía voluble y me encantaba que me cogiese en brazos me dejaba manejar como una muñeca como una barbie como una niña dejaba que me colocara donde él quisiera me gustaba subirme encima sin notar el peso y trotar . pensaba en el campamento de verano en el juego de hacer carreras a caballito y en que si me hubiese sentido así d suelta siempre, no me hubiese ofrecido a ser la que lleva en brazos me hubiese dejado coger y me hubiese dejado llevar pero era una niña con mucha carga y nadie capaz de soportarla. mi obsesión nunca fue la delgadez sino la ligereza, no era cuestión de kilos sino de lastre, yo quería tener el cuerpo de mi amiga Yaiza porque cuando iba a hacer los deberes a su casa siempre me iba a la misma hora q era cuando su padre regresaba y el de mi amiga Marta con su casa en la huerta sus caballos y los músculos de su padre las manos grandes de su padre capaz de arrancar cualquier dolor que ella arrastrara de columpiarla en un columpio y q llegara a lo más alto . Yo soñaba con ese cuerpo q no pesa porque la pena la sostienen muchas manos y yo quería que me metiesen mano para ayudarme con el peso pero se equivocaban de hueco y ahí no era y luego me daba infección y me pasaba llorando en el baño. Pensar en cosas de mi edad, quejarme de cosas de mi edad que me hicieran el avión y me metieran la cucharada en la boca. Yo comía y se me hacía bola y bola para un lado y bola para el otro y cuando tragaba se me hacía una masa en el estómago que no podía expulsar se me quedaba atravesada como las astillas en las palmas de la manos como la primera vez que me dijo que si quería metérmela en la boca que era muy fácil que solo tenía que tener cuidado con los dientes la médica le dijo a mi madre dale leche semi que esta niña va estreñida